Anatomía del perro ¿Qué sabes sobre la lengua del perro?
No se tiene mucha información acerca de la lengua del perro, aquí te damos algunas cosas sobre ella y su utilidad para el perro.
Esencialmente, la lengua del perro es un órgano muscular alargado con la superficie superior cubierto con epitelio especializado. Entre sus funciones incluyen responder al gusto, al tacto, al dolor y ayudar en la disipación del calor.
En el libro "Miller's Anatomy of the dog" de Howard E. Evans y Alexsander Lahunda, describen al menos ocho pares de músculos (transversales, longitudinales y perpendiculares) encargados de controlar todas los movimientos de la lengua del perro, algunos con nombres médicos latinos como los músculos estilogloso, hiogloso y geniogloso .
Aunque sobre la lengua del perro no se tiene mucha información, como hemos comentado al principio, sí que se tiene la certeza de la importancia de su utilidad en diversos aspectos fisiológicos del perro.
La lengua del perro, ¿Cómo la usa para beber agua?
Se sabe por diversos estudios que la parte de la punta de la lengua del perro tiene papilas gustativas exclusivas para el agua. Crean el deseo de beber, algo muy importante para su hidratación porque su dieta natural, que es a base de carne, contiene mucha sal. El simple hecho de beber para un perro es más complicado de lo que parece.
Los perros curvan la lengua dentro del agua para crear una zona de gran superficie en la que se llevan una porción de agua y luego ellos y la vuelven a meter en la boca cerrándola de golpe, rápidamente, antes de que el agua se escape.
Es un proceso sorprendentemente complejo y muy bonito para una necesidad diaria tan básica y por eso los perros salpican tanto cuando beben.
¿Quién no ha tenido que fregar el suelo de la cocina o en la parte donde él bebe agua después de haber satisfecho su sed?
Interesante es la forma que tienen los perros de beber agua. La lengua del perro tiene papilas gustativas específicas para el agua.
¿El perro distingue sabores?
El sentido del gusto del perro no viene principalmente por la boca, el perro es capaz de distinguir sabores dulces (por la parte de los bordes y la parte delantera de la lengua), salados (por la parte trasera y bordes de la lengua) y amargos (parte superior de la lengua) pero no está al mismo nivel del paladar humano.
Su sentido del gusto lo tiene principalmente por su olfato, su nariz, por lo que oliendo es como el perro interpreta los sabores. Habrás podido observar en más de una ocasión cómo el perro, cuando le vas a dar algún tipo de alimento, galleta o snack para perros, lo primero que hace es olerlo. Si no le convence el olor no lo introduce en la boca.
Esto es en lo que se basan todas las empresas de alimentación canina, piensos, galletas y snacks para perros para diseñar tipos de alimentos o galletas que tengan un olor intenso y que sea atractivo para los perros, añadiéndoles en muchos casos aditivos a modo de potenciadores de aroma.
La cantidad y la complejidad de las papilas gustativas de la lengua del perro es muy inferior a la del ser humano, se encuentran en toda la superficie de la lengua del perro y son de 5 tipos diferentes.
Están las llamadas papilas marginales que se advierten como una serie zonas estriadas o rugosidades en las partes laterales y frontales de la lengua del perro, sobre todo se aprecia notablemente en los cachorros, por lo que si te son muy llamativas no tienes por qué preocuparte.
La lengua del perro tiene cuatro pares de glándulas salivales (ambos lados) con pequeños canales de drenaje por los que la saliva fluye hacia la boca.
Una se encuentra en la zona de debajo de la lengua, en los laterales, a la altura del pómulo, otra situada en la base del canal auditivo del cartílago, otra en la zona de atrás del ángulo de la mandíbula, y la más pequeña en la zona de delante del ángulo de la mandíbula.
Las funciones de la lengua del perro que no están relacionadas con el gusto
En estas funciones sí que la lengua del perro tiene una gran importancia en su fisiología.
La lengua del perro es la única forma de poder regular su temperatura. Se podría decir que los perros transpiran o sudan por la lengua.
Cuando un perro está acalorado, fatigado o cansado su lengua aumenta de tamaño debido a un mayor fluido de la sangre por ella.
Sacando la lengua hace que su humedad sea la que, con el contacto del aire, controle su temperatura enfriando el flujo sanguíneo.
El jadeo rápido hace que sea más acelerado este proceso de enfriamiento. El cambio de color de la lengua a un tono amoratado es un síntoma de deshidratación o golpe de calor en el perro.
La lengua del perro regula su temperatura, al no sudar como lo hacemos nosotros la lengua del perro se hace muy importante para su transpiración. Si la lengua del perro cambia el color a morado o violeta se puede tratar de un golpe de calor.
Los perros también usan su lengua como un método de higiene. Hace que les sirva para arrastrar y arrancar ciertas impurezas en su pelaje y piel.
También les sirve como medio de socialización, la lengua de los perros es la zona más sensible de su cuerpo por lo que proporciona una gran intensidad en el contacto. El lamer, en el comportamiento canino, es una forma de anular las posibles respuestas agresivas de su superior.
¿La lengua del perro es desinfectante?
La verdad es que esto es el origen de un bulo popular, en parte. La saliva del perro está muy en contacto con el exterior y eso hace que tenga muchos agentes bacterianos. Los besos con los perros por estos motivos no son recomendables al igual que hay que evitar que nos laman en las heridas.
Es verdad que cuando un perro tiene una herida o picor, se lame.
Esto le ayuda a darle alivio y también a que cicatrice y desinfecte mejor sus heridas, debido a que el contenido de la baba del perro en ácido ascórbico hace reacción con los nitratos de la piel formando pequeñas concentraciones de monóxido de nitrógeno que ayudan.
Pero también la excesiva humedad en las heridas hace que no se curen rápidamente y puedan provocar mayores trastornos como infecciones.